5 formas sorprendentes de usar el humectante en la piel
El humectante por sí solo es un gran producto: puede ayudar a restaurar, hidratar y dar luminosidad al aspecto de tu piel. Nunca debes saltarte la aplicación del humectante, ya que es un elemento esencial para mantener tu piel hidratada y con un aspecto saludable. Olvidar el humectante puede provocar sequedad cutánea, descamación, tirantez y un desequilibrio general de las funciones naturales de la piel. Tanto si tu piel es normal, seca, grasa, mixta o sensible, necesitas un humectante en tu vida. Y a veces el humectante puede incluso proporcionar una funcionalidad alternativa. Lee nuestros cinco consejos sobre cómo puedes usar el humectante de formas sorprendentes.
1. Hidratante Antes del Maquillaje
La crema hidratante puede ayudar a crear una gran base para el maquillaje, lo que puede hacer que tu base, colorete, bronceador y sombras de ojos duren más y tengan un acabado único. Si quieres conseguir un aspecto resplandeciente, prueba con una crema hidratante iluminadora antes de aplicar el corrector o la base de maquillaje, para dar a tu piel un aspecto naturalmente resplandeciente y listo para la foto. Si tienes la piel grasa y quieres matificarla antes de aplicar el corrector o el maquillaje, opta por una crema BB reguladora de la grasa como Garnier SkinActive en Miracle Skin Perfector BB Cream Sin Aceite. Tiene una fórmula sin aceites diseñada específicamente para pieles grasas y ayuda a controlar los brillos, minimizar el aspecto de los poros, igualar el tono de la piel e hidratar. Utilízalo como base antes de aplicar la base de maquillaje para asegurarte de que tu piel está libre de brillos.
2. Hidratante antes del aceite
Si tu piel necesita un aporte extra de hidratación o un poco de cariño después de haber estado expuesta a las inclemencias del invierno, al sol o tras una exfoliación, redobla tus esfuerzos de hidratación. Utiliza una crema hidratante que apacigüe la piel, como Loción Hidratante Diaria SPF15 de Garnier SkinActive que defiende activamente tu piel contra la pérdida de hidratación. Su fórmula hidratante y no comedogénica está impregnada de glicerina y ayuda a mantener la piel activamente hidratada durante todo el día y a reforzar la barrera cutánea. Potencia tus esfuerzos de hidratación aplicando un aceite facial sobre tu crema hidratante. El aceite de almendras, el aceite de argán y el aceite de rosas son buenas opciones para nutrir tu piel cuando está especialmente reseca.
3. Hidratante antes del FPS
Cuando utilizas protectores solares físicos que contienen dióxido de titanio u óxido de zinc, estás protegiendo tu piel del sol: cuando te expongas al sol, los rayos rebotarán en tu piel como si llevaras un escudo. Sin embargo, es posible que no consigas los efectos embellecedores de la piel de la crema hidratante aplicando solo protectores solares, por lo que te recomendamos que apliques primero una crema hidratante para que tu piel aguante todo el día. El Gel-Crema Refrescante Rescate de la Hidratación de Garnier SkinActive es una fórmula ligera y no comedogénica que retiene la hidratación. Tu piel se sentirá hidratada y equilibrada y tendrá la base perfecta para el FPS.
Si la aplicación de dos productos te resulta demasiado lenta e incómoda, también puedes fusionar la crema hidratante y el FPS en uno solo. La Crema Hidratante Diaria Iluminadora y Alisadora FPS 15 Clearly Brighter de Garnier SkinActive es de rápida absorción, no grasa y convierte la piel apagada y áspera en una piel suave y de aspecto pulido, con un tono más radiante y uniforme. Hace todo esto al tiempo que protege tu piel de los rayos nocivos del sol.
4. Crema hidratante antes del esmalte de uñas
¿Te haces la manicura en casa? Asegúrate de hidratar las cutículas antes de empezar a pintarte las garras. Esto te será útil si el pincel resbala o si aplicas demasiado pulimento. Busca una crema hidratante de manos espesa y emoliente, formulada con manteca de karité o aceite de almendras, para que puedas arreglar fácilmente cualquier percance con las uñas.
5. Hidratante antes de la laca
¿Necesitas alisarte el vello alrededor de la cara en un apuro? Hidrata tu rostro y, a continuación, aplica el producto sobrante en el cabello para alisar los pelos sueltos y crear una raya suave. Sujétalo todo con un poco de laca para el cabello y voilà ya tienes la base perfecta para peinados como una coleta, un moño o una trenza. Lo que es bueno para tu piel también lo es para tu cabello en momentos en que la rapidez es esencial.
