Cómo saber si tu humectante ha dejado de ser beneficioso para tu piel
A veces usamos un humectante excelente pero después de un tiempo deja de ser tan bueno. Hay varias razones por las que puede que ya no estés tan satisfecha con tu producto como antes. Tal vez la fórmula se siente diferente. O ya no percibes los beneficios cutáneos que solías obtener. Puede que no sea tan eficaz para proteger tu piel. O extrañamente cuando te aplicas este humectante tu piel no se siente realmente hidratada. Te enseñamos cuatro maneras de asegurarte de que tu humectante sigue siendo adecuado para ti.
1. Tiene una mala consistencia
Puede que te hayas enamorado de tu humectante, pero últimamente te resulta extraño. Ya no se extiende con la misma suavidad, se ha vuelto acuoso o sale con una consistencia poco homogénea en lugar de como un líquido liso. Puede que tu humectante haya caducado o que se haya estropeado por efectos externos, como la exposición al sol o la penetración de agua en el producto. También puede desarrollar un olor extraño. En cuanto notes que tu humectante ya no tiene el aspecto o el tacto del producto que compraste originalmente, deberías sustituirlo por uno nuevo.
2. No tiene el efecto deseado
Los humectantes pueden prometer muchos beneficios para la piel. Pueden iluminar, alisar y perfeccionar tu piel. También pueden ayudar a difuminar el aspecto de las líneas de expresión o las manchas oscuras. Sobre todo debe brindar a tu piel hidratación y humectación. ¿Qué ocurre cuando deja de proporcionar estos beneficios? La razón de que tu humectante no funcione tan bien puede estar determinada por la estación del año o por nuestra edad."Nuestra piel cambia cada día y tiene necesidades distintas", afirma la dermatóloga certificada Dra. Diane Madfes."Está atenta a los cambios de tiempo: usa un humectante más liviano cuando la temperatura y la humedad aumenten". Para quienes tienen la piel seca, el mismo humectante puede dejar de ser lo suficientemente hidratante. A medida que envejecemos, la función de barrera de nuestra piel disminuye debido a una producción más lenta de lípidos en las membranas celulares. Añadir glicerina y ácido hialurónico aumentará la hidratación. Nuestra piel también pierde su capacidad de combatir los radicales libres que pueden dañar nuestro colágeno. Es hora de añadir péptidos".
3. El FPS ha caducado
Nada protegerá más tu piel del envejecimiento que el FPS. Sin embargo, el FPS puede caducar, así que vigila la fecha de caducidad para asegurarte de que tu piel sigue protegida. Un humectante diario con FPS puede ayudar a proteger tu piel y reforzar su función de barrera con antioxidantes. Clearly Brighter Brightening & Smoothing Moisturizer SPF15 de Garnier SkinActive ofrece protección solar de amplio espectro. Contiene vitaminas C y E antioxidantes, esencia de corteza de pino y ácido lipohidróxido (LHA) exfoliante suave. Cambia tu viejo humectante con FPS por este producto para proteger tu piel del sol y combatir los radicales libres.
4. Ya no brinda suficiente humectación a tu piel
Como ha mencionado antes la Dra. Madfes, puede que un producto que antes humectaba tu piel ya no lo haga lo suficiente. Si tu piel es más seca, esto puede ser un verdadero reto, ya que puedes sentir la piel tirante o agrietada. Aporta a tu piel hidratación adicional con una mascarilla nocturna, también conocida como crema de noche. Miracle Anti-Fatigue Sleeping Cream de Garnier SkinActive es extremadamente humectante. Su fórmula refrescante combina el poder profundamente hidratante de una mascarilla con la sensación ligera de una loción. Esta mascarilla nocturna está formulada con aceite esencial de lavanda, ácido hialurónico y ácidos hidróxidos que ayudan a refrescar tu piel. Al despertar tu piel estará recargada e hidratada, y tendrá un aspecto y un tacto humectados. Cuando sientas la piel reseca, en lugar de aplicarte más productos, busca fórmulas con ingredientes como las ceramidas o el ácido hialurónico para calmar la sed de tu piel y humectarla eficazmente para que pueda funcionar a pleno rendimiento.
